martes, 18 de octubre de 2016

La unidad en la acción se construye con actos no con discursos

El Consejo Directivo Central de UnTER, lamenta las expresiones vertidas públicamente por la Lista 10 Movimiento Paulo Freire (Ex Lista Celeste) en el marco de la campaña electoral.  No solo faltan a la verdad, también desconocen   los acuerdos realizados en los congresos donde todas las agrupaciones  acordaron  unificar las fuerzas y sostener en conjunto todas las acciones.

Cuestionan el acuerdo salarial de principios de año, cuando  sus Secretarios Generales votaron a favor, por mandato de sus asambleas. También hacen una lectura selectiva de  las paritarias, o no saben leerlas, pues en la del 15 de febrero, se expresa claramente que no era un acuerdo anual, porque ya se preveía el avance del ajuste y el impacto de la inflación en los salarios. Con los mismos argumentos que usa la patronal, la Paulo Freire (Ex Celeste) en sus documentos, pretende convencer al electorado.  Tampoco se hacen cargo que también votaron el actual Plan de Lucha, tal como consta en las actas, cada votación de paro fue unánime, con la participación de todas las seccionales.

En el mismo sentido, también se acordó priorizar la unidad en la acción y que todas las líneas internas  sostendrían  el Plan de Lucha, en función de las necesidades colectivas, más allá de las ambiciones agrupacionales.  Sin embargo, salvo honrosas excepciones, la participación de la agrupación Paulo Freire ( ex Celeste) en las acciones es minoritaria y con horario acotado, el necesario y suficiente para armar el collage de fotos para las redes sociales.

Para nosotros/as los consensos se construyen con respeto por  la diversidad de ideas, con la responsabilidad del conjunto, para que los acuerdos se acaten tanto como los mandatos de asambleas y congresos.  Con orgullo sostenemos y respetamos  la democracia sindical principio fundacional de UnTER y tenemos muy claro que la Conducción Central debe cumplir cada una de las definiciones de su órgano máximo. No existe ninguna expresión en los textos de las Actas paritarias que no coincida con la resolución de los congresos.

Ejercicio que olvidó la agrupación Celeste cuando le tocó conducir, primero con Mango y después con Molina. Ignoraron cada decisión tomada hasta que finalmente optaron por no  llamar más a  Congreso, para poder sostener su alianza con el gobierno, resistida por la mayoría de afiliados/as, y defendida a ultranza por quienes hoy se postulan,  al punto de permitir  al actual gobernador Weretilneck, que realizara la apertura de un Congreso Pedagógico organizado por el sindicato.

Tampoco podemos pedirle demasiado a una agrupación, cuando quien se arroga ser el máximo referente, Jorge Molina, ni  siquiera  participa de los  Congresos, marchas ni ha emitido un simple comunicado, ni como Secretario General de la CTA de los Trabajadores y  las Trabajadoras de Río Negro, ni como representante de CTERA . Siendo que UnTER es entidad de base de ambas organizaciones, nunca estuvo el acompañamiento que reclaman las bases en cada Congreso.

No nos extraña que quieran sacar los pies del plato a dos semanas de las elecciones, muchos de sus principales referentes abandonaron la  conducción de la UnTER para pasarse al gobierno  sin ningún prurito, y algunos por partida doble, porque cuando el proyecto que supuestamente los llevó del lado de la patronal se cayó por su propio peso, se pasaron a otro y hoy mantiene sus cargos como funcionarios. Pocos  se desafiliaron de UnTER, por lo que también podemos sospechar  que la falta de respuesta del gobierno, sea una forma de intervenir en la interna sindical.

Podemos hacer más extensa esta respuesta, pero, en eso acordamos con la Paulo Freire, no es tiempo de chiquitaje. El avance de las políticas neoliberales en el país y la provincia se deben enfrentar en conjunto, convocando a todos los sectores y organizaciones, aceptar el desafío de debatir con quienes parten de puntos de vista distintos, reconocer que el otro también puede aportar al pensamiento colectivo aunque parta de puntos de vista distintos.  Y esto implica coherencia y respeto a la hora de  construir.  No se cambia la sociedad con palabras altisonantes, sino con acciones, como decían nuestros mayores, cumplir con la palabra empeñada.

Frente al conflicto la campaña queda en segundo plano,  cada compañero, cada compañera emitirá su voto con total libertad, analizando y evaluando propuestas, que circulan por las redes sociales, que aparece en la cartelera distribuida en las escuelas, pero fundamentalmente, porque el reconocimiento de candidatos y candidatas surge del trabajo compartido, del compromiso asumido con sus pares y sus  propios estudiantes  mientras estuvieron frente al aula y de sus actos como dirigentes. Todo esto no se relata en 10 minutos de recreo, sino con un compromiso sostenido, colectivo y cotidiano
Viedma, 17 de octubre de 2016

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